Por David Uriarte /

Por demás interesante se va a poner la contienda electoral en Sinaloa, fuera de cualquier juicio de valor o sesgo partidista, la huella electoral medida en votos para cada partido en Sinaloa, propone un esquema muy cercano a lo que serán los resultados el próximo 2 de junio.

Las elecciones del 2021, dejaron un rastro de las simpatías de los electores, esta huella evidencia un arrastre sin precedente del partido en el poder y una especie de idolatría a su líder natural, sin embargo, esos mismos números de votos o simpatías, revelan que son precisamente las coaliciones las que hacen los copetes o diferencias para el triunfo.

Estas diferencias en el caso de Sinaloa, las construyó el Partido Sinaloense para rebasar a los partidos de oposición y darle la gubernatura, algunas presidencias municipales y diputaciones locales, al cambiar la distribución de fuerzas políticas, la oposición se fortalece de manera local con el PAS, y esto plantea un pronóstico diferente, mismo que se verá en catorce semanas.

El partido en el poder solo, o con la suma del Verde y el PT, son otra cosa cuando de votos se trata, aunque a muchos no les parezca, los resultados se miden por números no por emociones, y los votos traducidos a números rebasan los doscientos mil por parte del PAS, sólo es cuestión de revisar el comportamiento en las elecciones donde ha participado y las posiciones que ha logrado gracias a su trabajo.

Al revisar de manera objetiva los números de las elecciones del 21 en los municipios de Ahome, Culiacán, y Mazatlán, resulta más que obvio quién les completó el triunfo, en otras palabras, al quitarles los votos que les arrimó el PAS a estos municipios grandes y en este proceso que se avecina a las senadurías, el partido en el poder tendrá que demostrar su verdadera fuerza, trabajar para direccionar la intención de voto a sus candidatos.

El pronóstico se configura diferente por la simple y sencilla razón numérica más que por cualquier otra cosa, además, como la oposición prácticamente no es gobierno y sus espacios de representación en los congresos está disminuida, hay poco que reclamarles excepto que -el PRI robó más y que la causa de la violencia es Felipe Calderón-, después de eso, la oposición tendrá que renovar sus frases y buscar cómo llevar a los votantes a las urnas para conservar su poder.

El pronóstico es cuestión de análisis no de pasiones.