Por David Uriarte /
El Presidente y los periodistas conocen su negocio. El Presidente sabe lo que debe decir y lo que debe callar, los periodistas saben por dónde le duele al Presidente y parten de una premisa: “nunca preguntar lo que no saben”, es decir, las preguntas son una especie de examen.
Hay periodistas que tienen más de cincuenta años en la actividad informativa, correteando la noticia y buscando la primicia o la exclusiva, estos comunicadores permanecen en sus fuentes de trabajo mientras los políticos se reciclan cada tres o seis años.
La memoria periodística anida información relevante, información pasiva que de pronto se convierte en el condimento de la tendencia noticiosa. Los analistas y columnistas políticos traen en su libreta mental mucha información, información sensible, confidencial; hay periodistas que valen más por su silencio que por su dicho o su nota, esto lo sabe, y lo sabe bien el Presidente y los políticos que lo acompañan desde sus tiempos mozos en Tabasco, hasta el pináculo de su éxito político en la Presidencia.
Las tres cosas que le preocupan al presidente López son: la pandemia, la economía y los medios de comunicación; el
Presidente hizo una observación dando a entender que “no tanto los medios”, esto significa que es lo que más le preocupa, “la opinión pública”.
Es fácil que el Presidente convenza a 100 millones de mexicanos, difícil que haga lo mismo con 100 periodistas influyentes, aquellos que husmean información de los tres Poderes de la Unión.
El presidente López Obrador sería el hombre más feliz del mundo si la única información que recibieran los mexicanos fuera la de su mañanera, que los mexicanos sepan que más del 70% de los contratos son por adjudicación directa, que México tiene el cuarto lugar mundial de fallecimientos por COVID-19, que su Coordinador General de Comunicación Social -Jesús Ramírez Cuevas- está vinculado con empresas fantasmas, que se han perdido más de 10 millones de empleos… son noticias desagradables para cualquiera, más el Presidente.
El silencio no mejora la realidad, pero la información puede influir en la mejora de las políticas públicas de México.