Por David Uriarte /
Tras el Primer Informe del Gobierno Municipal que preside Juan de Dios Gámez Mendívil, se conocen una serie de obras algunas evidentes como el bacheo y el encarpetado de las principales calles y avenidas, otras más operativas o administrativas… La obra más evidente es la obra política derivada de la relación estrecha entre el presidente municipal de Culiacán y el gobernador Rubén Rocha Moya.
No cabe duda, cuando el Presidente Municipal cuenta con el apoyo y la confianza del Gobernador, administrar el municipio se vuelve un privilegio, la única beneficiada es la población.
De ninguna manera significa que el apoyo que recibe el municipio de Culiacán sea suficiente considerando los rezagos propios de una ciudad en constante crecimiento, sin embargo, los servicios públicos municipales se han mantenido en la medianía, el crecimiento económico es evidente a través de las distintas fuentes de inversión, y la relación del gobierno municipal con los poderes ejecutivo, legislativo y judicial es cordial y funcional.
Dentro de las primeras acciones que realizó Juan de Dios Gámez a su llegada, fue la conciliación con todas las fuerzas políticas dentro del cabildo, algunos regidores representan fuerzas políticas distintas a MORENA, sin embargo, el presidente municipal tuvo que echar mano de los aprendizajes previos obtenidos en la Delegación de los Programas de Desarrollo del Estado de Sinaloa, y en la cercanía que ha mantenido en la última década de su vida con el actual gobernador de Sinaloa.
De alguna manera, Juan de Dios Gámez se enseñó a relacionarse en altas esferas del gobierno federal, mantuvo la cercanía con políticos de altos vuelos y logró asimilar el comportamiento de los políticos que venden una imagen de sencillez y austeridad, tan es así que, en los mensajes radiofónicos previos a su informe, uno de sus estribillos era “sin tantos rollos”.
La imagen que proyecta el Presidente Municipal de Culiacán es producto del cuidado que han tenido los constructores de un proyecto político generacional, entre ellos se encuentra el propio gobernador cuyo afecto es evidente y envidiable para muchos servidores públicos que no cuentan con este privilegio.
Lo más destacado del primer informe del gobierno municipal, es la tranquilidad política que se ha construido en los escasos cinco meses de administración a cargo de Juan de Dios Gámez Mendívil.