La investigadora ha sido reconocida con el Premio Sinaloa de Ciencia, Tecnología e Innovación

Una trayectoria de 35 años, especializada en la investigación de tecnologías computacionales inteligentes -aplicadas a la educación-, le han valido a la doctora María Lucía Barrón Estrada, profesora e investigadora en el Instituto Tecnológico de Culiacán, obtener el Premio Sinaloa de Ciencia, Tecnología e Innovación 2018. Reconocimiento que significa la máxima distinción que otorga el Gobierno del Estado, al mérito y la trayectoria en la rama de investigación científica y desarrollo tecnológico.

La doctora Barrón relata que desde el inició de su carrera en informática en el Instituto Tecnológico de Culiacán, le surgió un interés por crear sistemas enfocados a la educación y comenzó a buscar una forma de facilitar el proceso en el uso de las computadoras.

Nos cuenta que, cuando realizó su tesis de maestría tuvo la oportunidad de enseñar su proyecto a los estudiantes de ingeniería, y fue ahí cuando en 1987, empezó a desarrollar sistemas que apoyaban a la educación.

Desde entonces ha estado trabajando en conjunto con investigadores y estudiantes para desarrollar aplicaciones y programas, con el objetivo de apoyar el proceso de enseñanza y aprendizaje que realizan tanto profesores como estudiantes.

Durante los últimos 10 años, han aplicado técnicas de inteligencia artificial con el fin de mejorar la realización de estos sistemas, así los estudiantes pueden tener una formación personalizada, esto para que se consideren y se tomen en cuenta sus estados emocionales, cuando ellos están utilizando el sistema.

”Nos dimos cuenta que los docentes, además de enfocarse  en sus actividades de clase, también consideran el estado emocional de sus alumnos, cuando un maestro ve que el estudiante está teniendo problemas, se acerca y dialoga con él; esto lo hace porque entiende que en estas circunstancias no son aptos para el aprendizaje. Entonces el maestro recurre a actividades, esto para mejorar el estado emocional del alumno, y estas técnicas de aprendizaje enfocadas a las emociones son algo que venimos desarrollando desde hace tiempo”, explica la investigadora.

”Las grandes cosas son producto de grandes esfuerzos”, María Barrón Estrada, investigadora.

En 2019, el Instituto de Apoyo a la Investigación e Innovación (INAPI), lanzó una convocatoria para el Premio Sinaloa de Ciencia que corresponde al año anterior, fue entonces que la doctora Barrón, envió su solicitud en la modalidad de Ciencias Sociales y Humanidades. Los requisitos son que tener una trayectoria en investigación, trabajar en el estado y que los aportes beneficien a la sociedad sinaloense de alguna forma.

De tal modo que no es difícil darse cuenta porque la investigadora sinaloense pudo participar y hacerse acreedora del galardón (que por cierto debió entregarse en 2019, pero por temas de presupuesto apenas se otorgó este año), pues sus aportaciones son muchas. Incluso, hacen de tres a cuatro soportes al año y una de las aplicaciones que hicieron, comenzará a utilizarse por la SEP el próximo año. Además, ellos crean las herramientas y las envían a las escuelas, con el fin de recibir retroalimentación y mejorar la experiencia del usuario.

Con la firme creencia de que no importa la edad o el género, y que uno debe ser capaz de cumplir lo que se proponga, la destacada investigadora también es líder del proyecto de tecnología con realidad aumentada e inteligencia artificial ARGeo, que promueve el Gobierno Federal para reforzar el aprendizaje personalizado de los estudiantes en Geometría y Química.

”A veces pienso que este reconocimiento es algo inmerecido, pues hay mucho talento en Sinaloa, en ocasiones tú ves tu trabajo y piensas que el trabajo del otro es más importante, porque él está produciendo comida o sana personas… pero al final también creo que todas las áreas son importantes, ya que todas aportan algo a la formación de uno como individuo. Además, este logro no solamente es mío, creo que es un logro de toda la comunidad del Tecnológico”, reflexionó.

 

Con información de Siomara Cuén