Aunque muchos le llaman el club de los ricos, la novedad en esta reunión del 2019, es el tema de la salud mental.
La crisis mundial de salud mental podría costarle al mundo 16 billones de dólares para 2030, el articulo del Foro Económico Mundial asegura que la mala salud mental impide que los empleados alcancen su máximo potencial y los obliga a tomarse más días de licencia por enfermedad, lo que retrasa la productividad y el crecimiento económico.
Por primera vez se toca el tema de la soledad, el aislamiento, la esquizofrenia y el trastorno bipolar como enfermedades mentales graves que marginan y aíslan a las personas.
Hace tiempo la Organización Mundial de la Salud había advertido a todos los países del mundo sobre enfermedades como la depresión y la ansiedad, se hacía referencia a dos cosas; la industria farmacéutica y sus ganancias millonarias, y la perdida de días hombre en las empresas.
Es probable que a los líderes mundiales lo que les importe sea la economía de sus empresas y negocios, sin embargo, que un foro de esta naturaleza tome en cuenta la salud mental es algo inusitado.
Depresión, ansiedad, trastorno bipolar, esquizofrenia, y trastornos de la personalidad, son los eventos que más crisis generan en las personas, las parejas y las familias.
Entre los costos de los medicamentos, las psicoterapias eventualmente largas, y la incapacidad para integrarse a una vida laboral y social funcional, las personas con alteraciones en su salud mental entran en un tobogán donde pierden lo más preciado después de la vida que es la salud, la familia y el trabajo.
Ojalá que las conclusiones y acuerdos del Foro Económico Mundial 2019, le abonen a la salud mental mundial, provoquen un grado de conciencia más ecológico en la industria farmacéutica, y construyan una conciencia social de la inmensa importancia de la visita al psicólogo.
