Miciudad.mx / El objetivo de la iniciativa de la “Ley de Austeridad Republicana” de MORENA es reducir de manera sostenida el costo de la administración pública.
Francisco Antonio Castañeda Verdugo, en su carácter de presidente municipal sustituto, en los últimos meses estuvo trabajando en dos vertientes: por un lado, en la atención de los damnificados del 20 de septiembre y, a la par, en la elaboración del documento que recopila y da cuenta de las acciones propias de su administración.
En un acto meramente administrativo, Tony Castañeda entregó el documento y con esto manda una señal a propios y extraños de una verdadera austeridad sin alharaca. Sin espectaculares, inserciones pagadas, anuncios o entrevistas radiofónicas, prensa, radio y televisión, en fin, los medios fueron informados a través de la oficina de la Coordinación General de Comunicación Social de la “Sesión de Cabildo y presentación del informe por escrito que hace el Ejecutivo municipal, Lic. Francisco Antonio Castañeda Verduzco, sobre el estado que guarda la administración municipal”.
Antier los regidores cenaron con el informe, ayer la ciudadanía de Culiacán desayunó con la noticia del informe y hoy la nota es la austeridad republicana de Tony Castañeda.
La estrategia da para más. ¿Se están alineando los astros para Castañeda Verduzco? ¿Está mandando una señal de que él también sabe tejer finito? ¿Fue instruido por su jefe político? ¿Está en la mira de los head-hunters? ¿Está en la misma sintonía de AMLO? ¿Le está haciendo su “guardadito” a Estrada Ferreiro? La verdad solo él y sus cercanos colaboradores, como su Coordinadora de Comunicación Social lo saben.
Los que extrañan la música de banda, las comidas tumultuosas y el glamour de los gafetes especiales, los reservados y las fotos con sus líderes, se quedaron listos y alborotados, el Tony Castañeda les aplicó por anticipado la Ley de Austeridad Republicana, y punto.
La mejor definición de inteligencia es la capacidad de resolver problemas, y el municipio resolvió muchos problemas con su Informe “fast track”. Con esto, el sustituto resultó tan respondón como el que se fue, cada quien con su estilo y guardadas las proporciones.
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