Por David Uriarte /
El Presidente de México anunció la creación del Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado. Robar significa quitar a una persona algo que le pertenece con ánimo de lucro, por medio de la violencia o la intimidación o utilizando la fuerza.
El Instituto será el vehículo o vía para que el pueblo reciba la evidencia de lo robado, aunque el Presidente no profundizo en el tema, quien será el encargado del INSDEPURO afirmó que –“Antes era como un Robin Hood al revés, se robaba a los pobres para beneficiar a los ricos”.
Como dijera la leyenda boxística Julio Cesar Chávez: hay tiro. “Hay tiro” significa que más claro no se puede ser, la creación de un Instituto para devolver lo robado, subsume que algunos de los integrantes de los gabinetes de Peña Nieto y sus antecesores, eran rateros.
Seguramente el Presidente López Obrador cuenta con la evidencia de lo robado, por eso institucionaliza su regreso al pueblo. No es cosa menor lo que está pasando en México, desnudar los procesos de corrupción con la evidencia, hace un reconocimiento a la palabra del presidente, fortalece su credibilidad y construye un contrapeso con la otra parte de la realidad que vive México en materia de violencia e inseguridad.
Si la Guardia Nacional consigue dar resultados en el segundo semestre del año, la percepción social del desempeño del nuevo régimen político en México aumentará considerablemente.
Por otra parte, el Presidente se volvió a fajar los pantalones al ver de frente a los reporteros de la “mañanera” y conceptualizar la categoría de prensa “fifí”, los fifís son –“fantoches, conservadores, sabelotodo, hipócritas y doble cara”; así o más claro. Parece que la baraja del Presidente tiene cartas marcadas y sabe que lo menos que le puede pasar es ganar el juego tanto a la prensa como a los políticos renegados, envidiosos, dolidos o fifís.
En el siguiente round veremos como “cabecea” el Presidente la renuncia del Director General del IMSS, aquí “el tiro” es entre German Martínez y el titular de la Secretaría de Hacienda Carlos Urzúa, aunque ya le pidieron que reconsidere la renuncia, la palabra final la tiene el Presidente: como en los viejos tiempos. Por lo pronto atentos al INSDEPURO.