Hoy es día internacional del abrazo. Esta celebración que se festeja cada 21 de enero se estableció en Clio, Michigan, en 1986 cuando Kevin Zaborney -un estadounidense preocupado por las pocas muestras de afecto que realiza la gente incluso con los miembros de su familia- pensó que, crear una festividad brindaría una excusa para hacer algo que todos nos llene de gusto, contacto humano y cariño.
Porqué debemos abrazar más
Un abrazo aporta grandes beneficios para el desarrollo físico y psicológico, incluso puede mejorar el sistema inmune. Además de dar confort, calidez y llenarnos de emoción, los abrazos:
Aportan seguridad: sobre todo cuando somos bebés, así que una buena dosis de abrazos nos ayuda a sentirnos seguros y confiados. Y cuando somos mayores nos reafirman.
Provoca placer: cada vez que abrazamos a alguien o nos abrazan, nuestro cerebro segrega dopamina y serotonina, ambas reducen el estrés y juntas proporcionan calma, tranquilidad y sosiego.
Cubre nuestras necesidades afectivas: una persona necesita unos 14 abrazos al día para sentirse plenamente querido. Las personas que no muestran afecto sufren de algo que en psicología se conoce como hambre de piel y no es más que la necesidad de contacto humano.
Permiten funcionar de mejor manera: cada abrazo nos ayuda a centrarnos y mantenernos felices y funcionales cada día.
Son la mejor cura contra la timidez: permiten a las personas tímidas entrar en confianza, ser más abiertas, espontáneas y seguras de sí mismos.
Disminuye la presión arterial: las personas que no tienen mucho contacto físico poseen una frecuencia cardíaca y una presión arterial mucho más alta que las personas que reciben abrazos de manera frecuente.
Incluso, abrazar por más de 20 segundos incrementa los niveles de oxitocina y reduce los niveles de estrés. Un abrazo significa alimento emocional; regala y recibe abrazos. ¡Al fin que son gratis!
