Por David Uriarte /
Todo indica que la navidad llegó adelantada para ambas partes del conflicto UAS-GOBIERNO, tanto la Universidad Autónoma de Sinaloa como el Gobierno del Estado de Sinaloa enderezaron el camino de la negociación con voluntad política, donde todos ganan, principalmente la sociedad sinaloense.
El conflicto maduró con el aderezo de la presidenta Claudia Sheinbaum, giró instrucciones precisas a la Secretaría de Gobernación, y su titular, Rosa Icela Rodríguez Velázquez. le encargó el tema al subsecretario que se mantuvo en contacto con gobierno del estado y el grupo representativo de la UAS, reuniones conjuntas donde se priorizo un solo tema: la instrucción de la presidenta de reducir el conflicto a la brevedad.
Se necesitó disposición de ambas partes, momentos tensos, señalamientos ríspidos, pero al final, la cordura empezó a reinar, ambas partes entendieron que el océano de esperanza donde reman se llama sociedad sinaloense, también entendieron que es el mismo barco, se dieron cuenta que remar cada quien por su lado, no conduce a buen puerto, por eso, dejaron a un lado las armas de la rispidez y empezaron a entenderse como personas civilizadas, coincidieron fundamentalmente en dos temas: los cargos son efímeros, y la esperanza de la sociedad está puesta en sus autoridades y sus instituciones.
Las autoridades dejarán de serlo en un tiempo, y la sociedad seguirá su camino nombrando nuevas autoridades, escribiendo la historia, quedando para el análisis las acciones de quienes protestaron cumplir y hacer cumplir la constitución y las leyes que de ella emanan.
Por el lado de la UAS, se construyó la disposición de analizar los nuevos métodos para nombrar a sus autoridades, fortaleciendo el concepto democrático que tanto se busca en una sociedad de transición, en una sociedad que hoy transita bajo un nuevo régimen político.
Se trata de ganar -ganar, gana la UAS, gana El GOBIERNO, y gana la SOCIEDAD, así lo entendieron las partes, y en un signo de madurez, suman esfuerzos en una sola dirección, el rumbo del bienestar social, donde la paz y la tranquilidad son los principales elementos a disfrutar, -hasta la cúspide-, es el lema de la UAS, todo indica que, a partir de hoy, se conquista la cúspide de la libertad, se conquista el aire democratizador que marca el nuevo rumbo de la UAS, y las nuevas relaciones con el Gobierno.
