Por David Uriarte /
Nada se sabe hasta que pasa, sin embargo, la predicción estadística, natural, o biológica es un acercamiento a la realidad futura, por ejemplo: una mujer de ocho semanas de embarazo, es muy probable que dentro de treinta semanas de a luz, un hombre que eyacula dentro del canal vaginal de una mujer ovulando, es muy probable que exista fecundación, una persona que se contagia con el virus de la influenza, es probable que desarrolle la enfermedad, es decir, existen escenarios previsibles cuando se conoce la naturaleza de los sujetos.
Si trasladamos las predicciones al terreno de la política, específicamente a los procesos electorales, se pueden hipotetizar varios escenarios, desde un ejercicio democrático civilizado, hasta una expresión agresiva y violenta que deslegitime cualquier resultado electoral.
Prácticamente en todas las entidades hay focos naranjas y como en la mitad de ellas, focos rojos, por lo que se espera una jornada entre tensa y violenta en varias zonas donde el crimen organizado busca sus propios intereses.
Un escenario puede ser aquel donde los levantones y las privaciones de la libertad de funcionarios de casillas, representantes de partidos, representantes de candidatos, o personal esencial en el proceso, sean el preludio de la jornada, una clara advertencia de los intereses de ciertos grupos en búsqueda de obtener resultados favorables.
Otro escenario puede ser la obstrucción para instalar las casillas y en consecuencia la ausencia de votaciones, también puede ocurrir el robo de urnas al saberse perdedores, amén de los conatos de violencia y las provocaciones propias de aquellos que se saben protegidos o impunes.
Son muchos los posibles escenarios, el esperado es el de la tranquilidad, participación, y civilidad antes, durante y después de la jornada electoral.
Otro escenario posible ante las crispaciones de grupos políticamente antagónicos, es el desconocimiento de los resultados más allá de la judicialización, la vía legal es lo esperado cuando los resultados son producto de irregularidades demostradas, sin embargo, desconocer los resultados y desconocer a los ganadores bajo amenazas o expresiones poco civilizadas, es la sombra que ronda algunas localidades donde la competencia está sumamente cerrada.
En fin, distintos escenarios están en la marquesina esperando el estreno de la película que se llama elecciones 2024.