Es alto el número de partículas de plástico que el ser humano está ingiriendo ante el alto uso de este material en la vida diaria, señala experto
El constante contacto con los plásticos puede llegar a afectar en determinado tiempo el estado de la salud, este agente sintético que lo encontramos en el uso de la vida diaria en botellas, en recipientes donde se guardan alimentos, en bolsas que utilizan para depositar bebidas que son consumidas a través del popote, partículas de plástico a niveles estratosféricos se están ingiriendo, opinó Saturnino Díaz.
El investigador de la Facultad de Biología expuso que gracias a una versión modificada de la espectroscopia Raman, una técnica basada en láser para analizar la composición química de células midiéndolas como moléculas que vibran en respuesta a la luz, es que se han encontrado nanopartículas de plástico presentes en el agua a niveles muy altos, que en antaño no se podía observar bajo los métodos tradicionales existentes hasta hace 5 años.
En ese escenario, una forma de cómo se activan o desprenden estas partículas, citó de ejemplo los refrescos, que contienen compuestos carbonatados ácidos que degradan las paredes de estos recipientes a niveles que a simple vista no pueden ser observados, ingiriendo estas partículas.
“Haciendo un análisis del agua que consumimos nosotros y que está depositada en recipientes de plásticos, podemos observar gracias al desarrollo de esa tecnología que hay muchas más partículas de las que se tenían consideradas, es decir si se consideraban 15 mil o 20 mil partículas, hoy gracias a la ciencia se ha descubierto que está por niveles de los 250 mil, 300 mil nanopartículas surgiendo de ahí su relevancia”, detalló.
Partículas, dijo, que en el cuerpo podrían acumularse en algunos órganos, de tal forma que podrían causar trastornos en el funcionamiento, aun cuando no está bien definida o estudiada esta línea hoy los estudios se tendrían que enfocar a observar qué es lo que está sucediendo con esa concentración de micro y nano partículas que se están consumiendo cada día.
Por ejemplo, el estudio Evaluación de la ingestión de plástico. De la naturaleza a las personas, encargado por la organización WWF y realizado por la Universidad de Newcastle de Australia revela que las personas ingerimos de media unos 2.000 pedazos de micro-plásticos cada semana, es decir, unos 5 gramos de plástico, una cantidad equivalente al peso de una tarjeta de crédito.
Con este descubrimiento, señaló, se está en un campo importante cuyo impacto en el conocimiento, sobre todo para las ciencias de la salud, es relevante para conocer cuáles serían las posibles afectaciones el consumir estas nano y micropartículas.
En ese sentido, destacó que, así como se realizan estudios con aves marinas que entran en contacto con los plásticos que al tener el agua gran concentración lo consumen como un alimento, lo mismo estará sucediendo sin darse cuenta, por lo que habría que prestar a importancia a este descubrimiento.
Una recomendación sería liberarse un poco del uso de los plásticos como recipientes directos de uso diario.