Por David Uriarte /
El 25 de enero del año 2005 según acta protocolizada por el notario público número 83 Lic. Eduardo Niebla Álvarez, se constituyó la Asociación Civil denominada “Colegio Médico de Sinaloa A.C.”, antes existía la Asociación Médica de Culiacán, que por cierto tiene un adeudo por concepto de predial de alrededor de 400 mil pesos según convenio firmado con el Ayuntamiento de Culiacán en 2016.
El presidente actual del Colegio Médico de Sinaloa es el Dr. José de Jesús Rivera Aguirre, quien por motivos de la pandemia no ha podido entregar la estafeta al relevo natural según los estatutos del propio colegio que en su caso será el Dr. Oswaldo Arturo Lagunas.
El objeto social del Colegio Médico es agrupar a los colegios de médicos generales y especialistas, así como a los miembros de otras profesiones afines que, dentro de su especialidad, lleven a cabo de manera preferente o exclusiva, trabajos relacionados con la medicina.
El colegio médico es una puerta de oportunidad social, es decir, imaginemos que cada socio o miembro aportara una consulta gratuita a los pacientes de bajos o escasos recursos, tendríamos un aporte colegiado en beneficio de un segmento amplio de la población.
Todas las especialidades están incluidas en el Colegio Médico, son médicos en su gran mayoría dispuestos a brindar un servicio social. Los planes del Dr. Lagunas incluyen propuestas y proyectos ambiciosos, pretende tener un acercamiento con las autoridades estatales, municipales y de salud con el objeto de construir una sinergia entre autoridades y la sociedad civil, más en estos tiempos de pandemia y contingencia sanitaria.
La promoción de la salud es otro de los proyectos, para esto se está buscando el acercamiento con los medios tradicionales de comunicación como los periódicos, la radio, la televisión y las redes sociales.
El trabajo de la nueva directiva consistirá principalmente en dos cosas: reagrupar a los colegios de médicos generales y especialistas, y cumplir con el objeto social de coadyuvar a una salud pública que permita una sociedad sana, y en caso de perder la salud, contar médicos calificados y vocación de servicio.