Por David Uriarte /

Todo indica que los trabajadores del gobierno municipal de Culiacán seguirán en resguardo domiciliario hasta que amaine la contingencia sanitaria por el COVID-19.

Según el portal de transparencia del gobierno de Culiacán, alrededor de cinco mil empleados son sindicalizados, y cerca de cuatro mil más entre policías, personal de confianza y eventuales, componen la nómina de H. Ayuntamiento, sin considerar a los jubilados.

El 25 de marzo se giró circular a los titulares de las diferentes áreas del Ayuntamiento de Culiacán para que los trabajadores de 65 años o más, hipertensos, con insuficiencia renal, lupus, cáncer; obesidad mórbida, problemas hepáticos, o enfermedades cardiacas; debidamente acreditada mediante dictamen médico, se les autorizaba a permanecer en resguardo domiciliario hasta nuevo aviso.

A partir del lunes 13 de abril, todos los empleados del gobierno municipal deberán permanecer en resguardo domiciliario hasta nuevo aviso, excepto las áreas de salud, policía, protección civil; inspección, aseo y limpia, bacheo, y las que han venido trabajando ininterrumpidamente en la contingencia sanitaria.

A partir de esta nueva instrucción del Presidente Municipal, las medidas de seguridad y protección al personal deberán reforzarse, y la recompensa o retribución económica también.

Los trabajadores que seguirán laborando por sus actividades esenciales, muestran vocación y compromiso, sin embargo, hay que reconocer el grado de riesgo elevado a contaminarse con el virus, por eso, deben mantener la conciencia alerta y apegarse hasta donde les sea posible a las medidas de higiene por todos conocidas.

Los empleados con factores de riesgo y aquellos que a partir de mañana lunes se suman al resguardo domiciliario como medida de prevención, deben saber o recordar que no son “vacaciones”, es un periodo de contingencia sanitaria, el mundo está sujeto a una de las pandemias devastadoras y sin precedentes en su comportamiento letal. Los ludópatas necrófilos inconscientes que juegan a la ruleta rusa con su incredulidad y su temeridad, recuerden que el COVID-19, es un asesino en serie y en serio.