Por David Uriarte /
De qué se asusta o se admira la oposición cuando se anuncian los logros de la 4T; informar de los avances y cumplimiento de las promesas presidenciales es práctica obligada por la constitución, es un mandamiento al ejecutivo federal.
El contenido del informe siempre será cuestionado por la oposición, incluyendo el formato y el protocolo, sin embargo, el contraste de lo que se dice con lo que existe, es la prueba que desnuda la verdad o la mentira.
Hay dos ópticas igual de válidas en la evaluación del desempeño presidencial, la objetiva o cuantitativa y la subjetiva o cualitativa.
Las mediciones duras de las conductas sociopáticas como los homicidios, secuestros, y extorsiones, siguen una tendencia estadística que se describe por sí sola… entonces, como se dice en el béisbol: “ante la base por bola no hay defensa”, es decir, ante la evidencia ni siquiera el berrinche funciona o es válido.
Por otra parte, las mediciones subjetivas o cualitativas como el bienestar, la percepción de seguridad, la mejoría en los esquemas de salud; educación e ingreso, manejo de las finanzas públicas, lo funcional de mantener o subsidiar a jóvenes que no estudian ni trabajan.
En fin, hay una serie de acciones que como dice el presidente López Obrador “no es para presumir”, pero se presumen como obras o acciones que marcan un antes y un después en el nuevo esquema de administración pública.
Las frases “con todo respeto” y “no es para presumir”, llevan implícito el permiso o aviso para faltar al respeto y presumir.
Que bueno que se presuma el esquema de políticas públicas del nuevo régimen político, sólo habría que agregar un toque de humildad, cordura, y juicio para no demeritar lo evidente; no insultar la inteligencia de muchos mexicanos, mucho menos desprestigiar a los expertos, técnicos y obreros de la información que sólo demuestran con evidencias duras la realidad de muchos temas sensibles para los mexicanos.
No es para presumir como dejaron las estructuras de gobierno los regímenes anteriores, no es para presumir el alto índice de homicidios, no es para presumir la falta de respeto a las fuerzas castrenses, y no es para presumir el crecimiento de la economía.